Resignación


Muchos días me despierto con el miedo de volverme a enamorar, de volver a elegir a la chica que con unas simples palabras bonitas y un beso en cualquier momento, me conquiste sin más. Debe ser tan bonito enamorarse de alguien que elijas, que cada día que pasa siento como este momento se aleja más, que solo podré querer a alguien que me ame, sin que jo la ame realmente. Ojalá llegue ese instante en el que pueda decir que estoy con una persona la cual desde el primer día que la vi, me gustó y que no paré de luchar hasta conquistarla.

Son tantas las frustraciones amorosas que he ido viviendo en el pasado que es como si mi destino fuera la resignación, y solo hago que pensar que si no quiero estar solo en un futuro, tendré que convencerme a mi mismo, que me gusta una chica que si algún día la viera por la calle sin saber quien es, podría pasar tranquilamente desapercibida por mi lado sin que me fijará en ella lo más mínimo.

Quiero sacarme los miedos, volverlo a intentar una y otra vez hasta lograr una chica que sea especial para mi. Pero cuando hecho la vista atrás, solo puedo ver amores frustrados, y lo peor de todo es que cuando he estado con chicas que realmente sabía que me podía enamorar, siempre ha habido un principio esperanzador en el cual pensaba que el primer beso llegaría pronto, pero como siempre me sucede, y como si por obra de magia sucediera, ese sentimiento mutuo de amor que parecía haber desparece.
Empiezo a pensar que encontrar el amor de mi vida empieza a ser un sueño inalcanzable.

Ángel o diablo

Tratar bien a las mujeres y ser todo un sentimental tendrían que ser cualidades para ser valoradas a la hora de que una chica escojiera a un chico y no a otro, pero la verdad es que viendo a mi alrededor podría llegar a asegurar que una chica elegiría antes a un chico de carácter difícil y con un punto de misterio, que a otro que le ponga las cosas fáciles, que le escriba poemas, le regale flores...

Esto me hace reflexionar y pensar que sería hora de cambiar, de dejar de ir detrás de las chicas como si fueran un ser especial, superior al hombre, e intentar ser un poco más malévolo, no tan bueno. Pero si hiciera esto, estaría cambiando mi personalidad, mi manera de ser y esto no creo que sea lo más adecuado, aunque se que por la vía que estoy sumergido no llegaré a ninguna parte.

Supongo que aún quedará alguna chica(de esas que se ven en las películas) que al final se enamora del chico que se lo está currando día tras día para conquistar a su amada, pero la realidad es que lo que se lleva hoy en día para ligar, es tener un coche propio y ser un poco 'cabroncete' con las chicas.

Amistad o algo más...


Jugar con las personas está mal. Esto todos lo sabemos, pero cuando resulta que eres tu quien sabes que estás jugando con alguien, la cosa cambia. Sabes que le haces daño, que estás hipotecando su futuro sentimental y que tienes que hacer algo al respecto. El problema es que cuando llega el fin de semana y se que alguien me puede hacer sentir querido y que podré tener ese abrazo que tanto me hace falta durante la semana, me cuesta decirle que no siento absolutamente nada. Intento ser claro, incluso le digo que no quedré nada con ella ni ahora ni en el futuro, que lo mejor seria ser amigos, que nos veamos sin que nos liemos, que simplemente me siento agusto con ella y que ojalá algún día pueda encontrar a la persona que se merece.

Todas estas cosas son muy bonitas decirlas, pero las digo con la certeza que por mucho que se que he sido claro y sincero, cuando llegue el fin de semana volverá a estar a mi lado, aunque me tenga que guardar te quieros, te amo y mil cosas que en ciertos momentos me se podrían pasar por la cabeza, pero que por miedo a que cada vez se pille más de mi, no le puedo decir.

Si fuera por mi dejaría de hacer estas cosas, pero ver como pasa el tiempo y que sigue sin venir esa chica con la que todo el mundo dice que algún día me llegará, hace que sea inevitable poder dejar escapar a alguien que me quiera, aunque jo no la pueda corresponder.

La envidia


Hoy me he levantado con ganas de ser como todos aquellos que sin hacer nada para que la suerte les sonría, logran todos sus objetivos. Me asombra ver como hay gente que tienen la facilidad de con una simple lectura a un libro se quedan con toda la información, que cuando salen de fiesta todas las chicas hacen cola para estar con ellos, y si ven a alguien que les gusta solo tienen que esperar a que venga, que los ves jugando a cualquier deporte y todos se les da bien. Y lo mejor de todo, no es que a uno se le da bien hacer una cosa y a otro otra, sino que todas estas mismas personas reunen todas estas cualidades y tengo que ver como viven una vida fácil, sin temores ni miedo al fracaso.

En mi caso, por ejemplo, por mucho que me concentre y me lea el temario una y mil veces seguirán habiendo cosas que no entienda. Con el tema de las chicas más de lo mismo...hago todo lo imposible para que se sientan como princesas, les intento quitar todos los complejos para subirles la autoestima, e intento que se fijen en mi estando pendientes de ellas en todo momento y por mucho que me esfuerzo...lo único que logro es una amistad(que también son importantes) o prepararlas para que otro se la acabe llevando. Para acabar con los ejemplos anteriores, en los deportes no podría ser menos, ya que por mucho que vaya a correr por el río o me prepare físicamente, siempre estará el típico que sin preparación alguna siempre correrá más que jo.


A todo esto se le llama envidia, y si es verdad que la tengo..xd. Pero ver, que por mucho que intento esforzarme siempre estoy en el mismo punto y observar como los demás sin hacer nada consiguen todo lo que quieren..., es algo que siempre me superará.

Juguetes rotos


Hay días que me siento un juguete...pero no uno de esos nuevos con el que tod@s querrían jugar..sino un juguete viejo, con alguna pieza suelta, el cual la gente añora y sería incapaz de tirar a la basura. El problema es que cada vez que ven un juguete nuevo, es como si volviera al trastero, a la recámara, al olvido y solo me vuelven a rescatar cuando el juguete nuevo ya nos les entretiene y ya no les encuentran utilidad.


Entonces es cuando quieren volver a jugar conmigo, ha recordar esos buenos momentos, a arrepentirse de haberme guardado y haber desaprovechado ese tiempo...pero la verdad es que ya no es lo mismo, me siento utilizado y se que es cuestión de tiempo que un día vuelvan a encontrar otro juguete que les vuelva a entretener más que yo. Cuando esto sucede vuelvo a la incomprensión, a la desconfianza y al temor de que una vez más me han vuelto ha hacer lo mismo y que nunca encontraré a alguien que me quiera tal y como soy, con mi piezas sueltas...


Supongo que lo único que toca es resignarse y saber que soy un juguete al que la gente solo me quedrá cuando los demás fallen.
Hoy será una noche perfecta, saldré como siempre, y sin saber que eres la chica con la que tanto he pensado, te conoceré. Alguien nos presentará, o porqué te veré sin más y te diré un hola, que otro día se transformará en... ¿vamos a tomar algo?, unos meses más tarde en un te quiero, unos años después en: si quiero y finalmente en las gracias por dejarme haber vivido tantas emociones juntas y tener la certeza que seguiremos viviendo grandes momentos.


Esta primera noche será indescriptible, primero te invitaré a bailar, te diré mil y una tonterías que se me ocurrirán para que te vayas fijando en mí y cuando ya no sepa que decirte, te diré de compartir la consumición que aún no habré gastado. Nos iremos a un sofá a compartir la bebida mientras escuchamos la música y vemos pasar la gente, mirando si la luna está llena, si las nubes tapan las estrellas, volviendo a decirte mil y unas tonterías para poder verte sonreír y cuando vea una estrella fugaz (que seguramente pueda ser un avión o cualquier otra cosa), aprovecharé para susurrarte que pidas un deseo y cuando ya solo existamos tu y yo, y nada de lo que nos rodee nos importe, haré cumplir tu deseo y te besaré.

Finalmente, nos olvidaremos del reloj, el tiempo se detendrá y solo sabremos que se ha hecho tarde cuando estemos abrazados viendo el amanecer. Verás chicas guapísimas pasar por el lado, pero para mi seguirás siendo mi top model, la chica por los que los más jovencitos forrarían tu foto en las paredes de la habitación.

Por esto, ...

Esta noche toca salir a ver si aparece esta chica...

El gran dilema

Como se suele decir, en esta vida cualquier paso que se da tiene sus propias consecuencias. Muchas veces, uno se encuentra en el difícil reto de seguir callado o decir lo que se piensa.

La postura más cómoda y segura, es la de seguir callado y dejar que las cosas sigan pasando sin más, con la certeza que todo seguirá igual. Por el contrario, está el enfrentarse a la verdad, al que opinará la gente o, lo más importante, que pensará esa persona a la que puede afectar unas palabras que, dependiendo de si son o no de su agrado, te pueden llevar al abismo de la soledad o a la más absoluta felicidad.

Por ejemplo, supongamos que en el trabajo te sientes incómodo y piensas que te están haciendo la vida imposible. Si te envalentonas y les dices lo que piensas puedes acabar perdiendo el trabajo, y si necesitas el dinero para vivir y sin él te puedes quedar sin un techo donde dormir, que seria mejor, callarse i acabar pagándolo con la salud, o apostar por una posible mejora. Si nos vamos al aspecto sentimental, también podríamos hacer un símil bastante parecido. El caso sería el siguiente: Que es mejor, decirle a la persona que te gusta todo lo que piensas y arriesgarte a perderla para siempre o mejor no decir nada y saber que siempre lo podrás tener como amigo/a. Lo fácil es pensar que porqué le digas a alguien que te gusta no tienes que perder la amistad, pero la realidad es que estas son las cosas que pueden hacer que amigos se separen y que incluso no vuelvan a saber más el uno del otro.
Decir lo que uno piensa está muy bien, pero realmente... vale la pena decir unas palabras que sabes que seguramente van a ir en tu contra? Muchos dirían que no, pero pensándolo bien...Por qué no tener fe en uno mismo y querer cambiar el curso de la vida a tu favor?

Esperanzas imaginarias

Mi pareja, mi novia, mi acompañante sentimental, mi amor, mi corazón...como me gustaría poder decir algún día estas palabras sin temor a que simplemente sean palabras escritas en un blog y que pudieran salir de mi boca junto a esa chica especial la cual espero encontrar un día.

Como me gustaría dejarme de imaginar que se siente al estar abrazado a alguien al despertarme, poder hacer una corazón con el ketchup i ver como sonríe, poder pasar una de esas noches mágicas viendo las estrellas mientras nos miramos, lo que daría por poder dejar a la chica en su casa i mientras bajo por las escaleras enviarle un mensaje que diga: te quiero, poder mirar desde mi ventana y suspirar por ella al mismo tiempo que ella lo hace por mi desde la suya, sentirme feliz simplemente porqué ella también lo está...

Espero que algún día todo esto pueda tener algún significado en mi vida:)